El camino de la relación de pareja

Imagina lo siguiente: dos personas avanzan juntas por el centro de un largo camino de tierra. Como muchos caminos, éste tiene una ligera inclinación hacia los lados para que cuando llueva, el agua se desplace hacia las cunetas y no se formen charcos. Esta inclinación es  muy útil, pero de una manera sutil también hace que nuestros protagonistas, al caminar, se desvíen un poco hacia fuera, cada uno hacia un lado.

Así cada pocos kilómetros de viaje distraído se dan cuenta de que se han alejado unos metros el uno del otro y tienen que corregir el rumbo para volver a acercarse y continuar juntos. Pero, además, el camino tiene de vez en cuando algunos baches y zanjas, piedras y ramas caídas, que, al evitarlas, hacen más fácil el desvío de rumbo de cada uno de nuestros caminantes.

Y tienen que volver a hacer el esfuerzo de acercarse para seguir caminando juntos.

Así funcionan las relaciones de pareja. Si tan sólo nos dejamos llevar, mantenemos la inercia sin corregir el rumbo cuando hace falta, podemos descubrir que pasado el tiempo y casi sin darnos cuenta, nos hemos alejado el uno del otro de una manera irresoluble.

¿Te has parado a pensar en qué punto del camino estáis? No dejes que la inercia guíe el rumbo de la relación. 

Comentarios

  • María 26 octubre, 2012 at 6:43

    Enhorabuena , soy la mujer de un paciente suyo , y la verdad que hay médicos y médicos , pero ustedes saben ayudar al enfermo , un saludo.

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    • YSINEMBARGOTEQUIERO 26 octubre, 2012 at 11:34

      María, la enhorabuena es para vosotros, por todo el camino recorrido a pesar de las dificultades. Fuerte abrazo de tus doctores.

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