Tratamiento Psiquiátrico

Trabajar en un gran hospital universitario de la red pública sanitaria obliga a los profesionales que allí ejercen su especialidad médica a mantenerse al día en cuanto a los últimos tratamientos y abordajes de patologías muy graves.
Aunque soy una gran defensora de la psicoterapia como vehículo de comprensión y terapéutico de los problemas psíquicos, debo reconocer que es imprescindible conocer a fondo la psicopatología para realizar diagnósticos correctos y que no escapen trastornos sin ser tratados adecuadamente. Esto favorece el pronóstico de muchas enfermedades.
En consulta dedico una parte de mi tiempo al diagnóstico y tratamiento farmacológico de patologías psiquiátricas de diferente gravedad, entre ellas:
-Trastornos de ansiedad (ansiedad generalizada, crisis de ansiedad con o sin agorafobia).
-Trastornos del sueño.
-Trastornos del estado del ánimo: depresión, trastorno bipolar (fases maniacas, hipomaniacas y depresivas), hipertimias, Trastorno esquizoafectivo.
-Trastornos de estrés postraumático.
-Trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y otros trastornos obsesivos.
-Fobia social y otras fobias.
-Trastornos adaptativos (a estresores vitales).
-Trastornos de personalidad: Trastorno límite o borderline de la personalidad y otros.
-Trastornos de la conducta alimentaria: tipo anorexia restrictiva y/o bulimia.
-Trastornos de la esfera psicótica: brote psicótico por consumo de tóxicos, psicosis breve, esquizofrenia (diversos tipos), trastorno esquizoide y esquizotípico.
-Trastorno por abuso o dependencia a alcohol u otros tóxicos.
-Tabaquismo.
La frecuencia de consultas una vez hecho el diagnóstico y prescrito el tratamiento suele ser quincenal al inicio y mensual después, con una duración de 30 minutos por sesión.